Piedras y guijarros que suman la cuenta del paso de los días.
Memoria de vida grabada sobre piedra.
Río. 2015 Hilario Bravo Lápiz, collage y fuego 89 x 116 cm. |
Un agujero practicado a un plano, un simple vacío
ante el que caer de rodillas,
no con la oficiosa aparatosidad de quien se humilla ante un altar,
sino como quien cae rendido ante la visión del cielo nocturno del verano
y ante la incomprensión del destino último del universo.
Río. 2015 Hilario Bravo Proceso de elaboración |
TRÍPTICO DE FREYA
Compuesto
por tres piezas –estelas inspiradas en los caracteres rúnicos— el Tríptico
de Freya rinde culto a la más venerada diosa de la Europa nórdica, una de
las deidades más polivalentes y completas de toda la mitología ya que asume en
sí misma los atributos de belleza y amor; de fertilidad, vegetación y buenas
cosechas; de la magia y la profecía, de la riqueza y la curación, pero también
de la muerte y la guerra.
Esta deidad nórdica asume pues, para sí, los papeles que, en la Grecia antigua, desempeñarían Afrodita, Deméter, Casandra, Yaso, Perséfone y Palas Atenea.
El panel izquierdo "Et tamen stellae
(Y sin embargo, las estrellas)", el panel central "In oculis lux (En los ojos la luz)"
y el panel derecho "Ubi est? (¿Dónde
está?)" son títulos que intentan perfilar y responder a los citados
atributos, mientras la unidad que supone
el juego de estrellas -que conforma la zona inferior de la obra- recuerda una
entrelazada cadena del mundo femenino.
Runas VIII, IX y X (Tríptico de Freya) 2017 Hilario Bravo Óleo, carboncillo, collage y pan de oro sobre tela 125 x 54 cm (c/u) |
No hay comentarios:
Publicar un comentario